Ayu y crisis
Por: Mamo Zarey Maku (Karmen Pérez)
Kankurwa Kasigua en Moroto
El áyu (hoja de coca), es un elemento especial que nos fue asignado a los indígenas. Este áyu lo hay en toda la naturaleza y existen distintas variedades que se han sacado mediante injertos, para hacer la hoja más grande y que rinda más en el gran negocio que la demanda de la sociedad blanca industrializada ha creado.
Pero para el mamo, el áyu es una de las primeras plantas sagradas; es el pensamiento, es el espíritu, es el eje, es todo, es la esencia de la misma naturaleza para poder dialogar, para poder entrar en comunicación con seres de otras dimensiones, para poder dirigirse al mundo entero, al universo; poder comunicarnos de aquí a España "telefónicamente" por medio del éter del áyu que se va formando. Esto es como el pensamiento, el espíritu, la esencia con que se transporta, se desplaza a otras dimensiones.
Esta es la función que cumple el áyu para el indígena, pero el Bunachu ha convertido nuestra planta sagrada en un negocio del que extrae la cocaína, el bazuco y esto ha sido el acabose para el blanco, por haber violado esa naturaleza sagrada del áyu que envenenará al mundo entero, al blanco y tras del dinero producido, vendrán grandes crímenes, asesinaran a gobernantes y a todo el mundo.
Por eso, nosotros los mamos nos preocupamos y queremos encontrar la manera de regenerar al blanco mediante la toma de conciencia, de que reconozca esa parte. Pero mientras se siga creyendo que el producto extraído es para elevarse, para estar contento, pero si eso sigue así, eso acabará con el mundo y con nosotros mismos, porque se ha violado la esencia, el espíritu del áyu que sirve de transporte, de vehículo para hacer los matrimonios, los ritos del bautizo, los ritos del Eyza, para todo ritual la esencia es el áyu , áyu Naluñanga es el espíritu.
Para todo ritual se necesita el ayú , para el agua, para todo ejercicio de los mamos hace falta el áyu; toda persona que coma áyu tiene que hacerlo con el permiso del mamo, pues de lo contrario está violando. Lo mismo sucede para comer el Yua.
. Nuestra Sierra Nevada es el Corazón del Mundo, es el centro del universo que nos fue dejado a los mamos, pero el blanco no quiere reconocerlo así; eso está bien, que se nieguen a reconocernos, pero ya sea que crean o no crean, vendrán los acontecimientos en contra de todos, por haberse negado a ese reconocimiento.
También existían los Tani o plumajes sagrados que teníamos los indígenas, pero un mamo cambió la reliquia que teníamos para la producción de alimentos por la campana, y ue a parar a España. Estas reliquias, así como el territorio Sagrado de la Sierra Nevada nos fue dejado a cuatro comunidades, con sus respectivos resguardos, donde existen partes planas y partes escarpadas que son sólo para la conservación de los Chunduas o sea, los picos nevados más altos para que los mamos los cuidáramos, pues dentro de esos Chunduas están los patrones, que son los que guiaran al blanco para que llegue al fin; quieran creer o no lo crean, así es.
Todavía se conserva eso, el padre y la madre del blanco, del indígena, están dentro de los Chunduas en tinajas y en Umükuy de oro. Eso no se ha violado hasta ahora, pero quieren hacerlo para debilitarnos y por eso queremos que el blanco reconozca que sería un gran mal para el mundo si se violan los picos de la Sierra Nevada. Por eso, no estamos de acuerdo con que el gobierno y otras gentes quieran llegar a violar nuestros Chunduas que contienen los patrones para la defensa de todos, para los alimentos, para el café.
Desde el comienzo todo es ley. Parece que hubiera cambiado hoy en día, pero es la misma ley y todas las cosas que fueron hechas tienen su ley, como la carrumba que va girando y va hilando, eso es lo mismo y esas leyes hay que cumplirlas pero no se está haciendo.
Hay que volver a los Tani Kansamaria, Yósa, Yueru, Punkiri, Charu, Kungwi Yosa, plumas de todas las aves, de todos los colores, de tierra caliente y fría para hacer la corona de plumas.
En los bastones, en las piedras, están todas las leyes escritas y eso es lo que se debiera investigar, pero no se lo está haciendo. Se debe seguir, porque está bien que se estudien las distintas ciencias, pero mientras no hagamos lo mismo con la parte oculta que tenemos o materia negra, con la cual la ciencia moderna ni los científicos han dado, lo mismo sucede con los mamos de ahora que tampoco han dado con la materia negra.
Igualmente se debe investigar el tiempo, el espacio, la materia que ni el blanco, ni el mamo sencillo lo están haciendo para dar con la materia negra, y mientras no lo hagamos, estaremos errados. Tenemos que seguir, porque esto se está acabando y más adelante nos daremos cuenta de dónde estuvo el error y dónde estuvo la falla por no haber buscado y encontrado la materia negra. Esto es un gran reto.
Las fumigaciones que por motivo de los llamados cultivos ilícitos ha hecho el gobierno por orden gringa en nuestra Sierra Nevada, han causado grandes perjuicios a nuestras sementeras y por lo tanto al espíritu del áyu, a los alimentos, al agua, todo lo han contaminado.
Para utilizar el áyu, nosotros los mamos tenemos una autorización especial para su siembra. Entonces, ¿por qué hoy se lo siembra sin esa autorización y se lo cocina en calderos hechos de gringo, de blanco, si eso se tiene que hacer en ollas especiales de barro? Esto se está violando y de ahí las consecuencias que se están viviendo de fiebres, calenturas, paludismo , sida, cáncer por la violación de tostar el áyu en calderos y todo el proceso que se sigue para sacar la cocaína, por lo que el espíritu del áyu se está haciendo sentir acabando con mucha gente, contaminando los ríos, todo por violar el espíritu de nuestra planta sagrada, lo cual el hombre blanco no tiene en cuenta para analizar toda su crisis. Nosotros, los mamos de la Sierra Nevada de Santa Marta no cultivamos ni amapola, ni marihuana, ni borrachero y menos autorizamos a nuestros indígenas que lo hagan, pues son plantas que causan daño a la comunidad si no se saben utilizar, lo mismo que el áyu que no se debe consumir sin el permiso del mamo.
La producción que se hace del áyu por parte del blanco, es para su comercialización en casi todo el mundo y eso es lo que está causando grandes males y los que causará, porque hay que repetir que el áyu es para ritos especiales y eso lo han violado, saliéndose del límite de su uso, no pidiendo permiso, no haciendo el pagamento sino que el fin es sacar polvo para hacer plata, hacer capital, enriquecerse y la prueba está en tantos crímenes y crisis de distintos gobiernos y lo que seguirá.
Nosotros tenemos un pensamiento universal, no sólo circunscrito a la Sierra Nevada y vemos como el hermano menor a pesar de tanto avance científico tiene sus errores y por eso los mamos enviamos estos mensajes para ayudarles y queremos que se haga una reflexión sobre los grandes daños que se han causado y los que se están provocando con tanta contaminación, con la violación de los cerros sagrados, corte de árboles también sagrados que no se respetan, se hacen Sokolas a orillas de los arroyos.
Todas estas leyes que se nos dieron y están en piedras y jeroglíficos, es lo que debieran de estudiar, pero no se hace y de esa manera no se llega al conocimiento de la materia negra.
Yo soy un mamo que he venido constantemente investigando con mamos mayores en distintos sitios de la Sierra como Donachuy, Takina, Makutama, Cherwa, San José donde tengo varios maestros Kogis , Arzarios, Kakachucuas e Ijkas, o sea cuatro fuerzas que estamos investigando, estudiando pues en toda la Sierra hay gente de gran conocimiento ancestral para seguir con nuestros ritos y pagamentos que se deben hacer a la tierra por los males que se le causan, por las violaciones que se realizan con fornicaciones, adulterios, porque no se baña la primera menstruación de la niña, no se realizan los bautizos, los Eyzas no se bañan, no se bautizan los alimentos para tomarlos, los lugares donde se van a hacer las Zocolas hay que prepararlos, lo mismo que las semillas. Por esa violación de las leyes, por ese incumplimiento es que se vienen todas las enfermedades, los males, la muerte de los animales, por el olvido en que se ha caído de nuestra tradición.
A los Zícuri , que son una forma de patrones que están en distintas partes altas de la Sierra Nevada, esos Zikuri que están llenos de elementos que son la madre y el padre de todos nosotros, debemos rendirles tributo y hacer los pagamentos correspondientes para que así se irradie esa energía y podamos ayudar al blanco, al gringo, al alemán, al inglés que tanto les gusta el impusi (la cocaína) que los va a acabar.
Así como quienes utilizan los servicios de luz, agua, etc. tienen que pagar a las empresas, así mismo debemos nosotros pagarle a la naturaleza pues el agua que se toma no se está pagando, por el sol que nos ilumina no pagamos, esa luz tenemos que pagarla, contribuir por el aire que respiramos, por la misma tierra que estamos pisando (el catastro que diría el Bunachu), por la tierra en la que sembramos que no es nuestra; todo esto tiene sus patrones para hacer los pagamentos, con algo de nosotros el cuerpo, la carne física y la sangre (Gueiru) para con eso contribuir al pago. Todo esto, tiene un significado científico muy profundo, muy grande, que vale más que cualquier peso que se aporte, pues aquí se aporta la carne física y la sangre para rendir pago por todo y no sólo por nosotros sino también por nuestros hermanos que están violando las leyes.
¿Quién se acuerda del sol? nadie. ¿Quién se acuerda del aire? nadie. Se dirá si mucho, que no se lo contamine, pero de hacerle pagamento al aire no, porque tiene su padre y hay que hacerle su tributo que es la parte científica que conocemos y realizamos los mamos. Para estos pagamentos utilizamos distintos elementos según la ocasión, ya sean plantas, piedras, animales, que es la parte sagrada bastante conocida y respetada por los mamos.
Enero 1996
Traducción e interpretación: Mamo Bunchanawin