Martín Cruz Vega (Colombia)
Por: Martín Cruz Vega
Julio 8-15, 2017
POETAS INVITADOS
Mi escritura
Mi prosa huele a tierra removida, a tronco sin ramas y sin vida A piedras arrancadas al azar a helechos marchitos A espinas aceradas como espada de Aquiles Mi poesía huele a rio, a despeñaderos y cascadas Mi prosa huele a pantano y agua reventada al paso del guerrero Mi poesía, tiene el brillo de la noche y la oscuridad del día Es metralla y pólvora Mi poesía contiene ideas, futuro y vida Mi prosa tiene el fino canto del gorrión El ahogado llanto del niño El llanto del hombre en la tristeza Las dulces lágrimas del amante De ella que entregó su corazón Mi prosa tiene quimeras, muerte y vida El susurro divino de la soledad Mi canto tiene la danza de las palmeras Lleva en su garganta el eco suspendido en la trinchera Mi poema tiene la desesperanza de condena La libertad del espíritu La conciencia y la razón, censuradas por el imperio Mi poema tiene amor desenfrenado Tiene color a sangre rojo como el áureo oriente Mi prosa tiene filo, suspicacia mordaz y elocuencia Tienen la sensación de un verso inconcluso Tiene la pureza del primer encuentro amoroso Pero tiene también la sabiduría del amante nocturno De la mujer de labios saturados de fresa y néctar de la mejor flor Mi prosa es fuego y aguas mansas Es mar apacible y tormenta viva Es orgasmo y llanto triste Es melodía y canto sordo Mi prosa es rebeldía Imaginación creadora de guerrillero en la contienda Mi prosa soy yo en harapos, ojos vivos y cuencas vacías Así es mi escritura.
(Octubre de 2013)
Lluvia…
Relámpagos que me enceguecen a cada paso Luz fugaz y traicionera Oscuridad fantasmal, río caudaloso resbalándose como serpiente venenosa Por entre rocas frías y una pendiente mortal Invierno que humedece mi humanidad guerrillera Con gotas de cristal y sábila que golpean mi rostro Lluvia ingrata que inunda en sombras tras el llanto de dolor y rabia Lluvia que me alberga en su torrencial de pantano y lodo Lluvia de aquel octubre litoral De afilados picos y leyendas nativas, de caminos y trochas salvajes De espinas aceradas como garfios que penetran nuestra piel Cánticos y murmullo que se alzan por entre palmeras y riscos Fuentes de agua cristalina que mitigan mi sed La lluvia es menuda como arena del desierto, chorros de agua bajan de los frondosos árboles La lluvia alimenta mi soledad, mi nostalgia y endulza mi poesía Lluvia tropical que brota de grises nubes que nos miran entre sabanas de algodón y terciopelo Lluvia que enjuaga la cara al sol, que lo somete a las tinieblas de Eolo Lluvia que golpea mi caleta, irriga mi piel en melodías de anís y hierba fresca Torrente natural que besa cada piedra y cada playa, cada árbol y cada esperanza furtiva Lluvia, compañera de días y largas noches, siempre vigilante Bajo la lluvia te encontré, tembloroso y taciturno y bajo la lluvia partiste mi corazón en gotas de sangre y dolor.
(2013)
Silencio
En silencio acaricio tus manos delgadas En silencio tomas mis hombros, te empinas y besas mis mejillas Todo en el silencio de la noche, o en el silencio opaco del atardecer En el silencio de la nostalgia y de la ausencia inevitable En el silencio de tus sueños, en el silencio del llanto escondido En el silencio de tus ojos negros como la noche En silencio te encontré en la espiga dorada de tus años En el silencio divino de tus sueños En silencio construyendo realidades y épicas batallas por el honor y de la libertad En silencio brota el tallo su tierna flor En silencio avanzamos hacia la victoria En silencio avanza el guerrero, llevado de la mano por las sombras que guardan su secreto En silencio viven los mártires despidiendo rayos y auroras de fe y de esperanza En silencio observo el mar a la distancia fundirse con las nubes En silencio voy taciturno por la selva Por los ríos, valles y montañas En silencio muere el miserable En silencio el imperio tiñe de sangre los campos de la América y del mundo En silencio avanza la vorágine de la muerte, en silencio sepulta el pueblo a sus mejores hijos En silencio de la mano voy contigo, sembrando un árbol, cultivando una flor En silencio empuño la espada, en silencio voy por la noche más oscura de metales de vida y muerte En silencio siempre voy por la pradera, deshojando versos y poemas
Martín Cruz Vega nació en la región de Marquetalia, al sur del Tolima. En julio de 2016 fue designado miembro del Mecanismo de Monitoreo y Verificación del Acuerdo de Paz entre el Gobierno y las FARC. El 8 de agosto hizo parte de las delimitaciones de las ZVTN y PTN. Actualmente hace parte del Mecanismo de Monitoreo y Verificación, del Cese del Fuego, Hostilidades, Bilateral y definitivo, (CFHBD Y DA) entre la Fuerza Pública y las FARC-EP. Los poemas que aquí se incluyen hacen parte de su Diario de Guerra y Paz de reciente publicación.
Publicado el 10 de julio de 2017