Nikolaos Vlahakis, Grecia
Por: Nikolaos Vlahakis
Antiguos jefes guerreros
con águilas rompehuesos
- especie en vías de extinción
como consciencias de Comnenos –
bronce patinado que no alcanzó la gloria
pelerinas con diademas
y espadas que cuelgan de las vigas
- especies para descubrir
por aprendices arqueólogos –
de aspecto salvaje y sueño inquieto,
ánimas ya, pero no de mármol
con centavos en el bolsillo y cigarillos
para la comitiva fúnebre.
Las barquillas los traen y llevan a lagos
con ciudades sumergidas
ranas encantadas
como brigadas en espera
que croan embarazadas
de Historia:
camuflados alaridos de guerra
y mensajes de cantares de gesta
- ¡Esperad la hora
que desenvainemos
esperad, nada más!
Mujeres de entrañas desgarradas
y efusión de lamentos,
dientes estropeados
y mejillas abofeteadas,
humilladas por la espera,
tejen cuerdas
para invisibles mandolinas.
II
Mercenarios extranjeros
consumiendo champaña
e impartiendo órdenes
por motorolas sin hilos.
Desde que murió Ginsberg
pasaron tres meses
y Hong Kong
ya pertenece a Pekín;
¡Hitler vive en California!
exclamará Jim Morrison
y un rey idiota
retorna a la África del Sur.
Sobre la tumba de Apollinaire
crece maleza allá en París
y los huesos del Che
fueron entregados a Aleida
- en Vigamarte
no quedó sino un molde de yeso;
Llamo pues a mis amigos
los surrealistas y sus amadas
- yeguas blancas en cuadros de la helenidad –
pequeños dioses enmohecidos
y siempre vírgenes señoras de las viñas.
¡Viva, exclamo, nuestra muerte en sueños!
y vivan las chicas
que nos amaron
los veranos aprendiendo francés
y llenando álbumes rosados.
III
Desnudo y descalzo
pero bien reputado,
recibí los tropeles de refugiados,
como si no hubiera
nadie más para esperarlos,
fuera de mí.
Ululando histéricamente
con gordianos sollozos
inconsolables, decían,
de la Historia,
con dolores pintados
sobre sus entrañas escabrosas
y sobre los senderos
que escogieran ese Junio,
cuando las coronas ardían
como exorcismos,
y los laureles
rompían en sollozos de cobrizo tintineo
¿o serían relámpagos?
Nunca llegué a comprender
los mensajes
de aquel verano.
Refrán para epílogo
En el medio el Sol
dos lanzas vagabundo
disco rojo
rojo y volcánico.
Y en el medio el Sol
dos lanzas sin crepúsculo
muerte de rizado pelo
rojo y volcánico.
El choque de las civilizaciones
El choque de las Civilizaciones
Contemplada desde los altiplanos
Que rodeaban la capital
Se parecía a una mancha
Incandescente
Que daba vueltas en el aire
Cual escudo
Encendido, con grabado de plata
De un cruzado tísico
En las costas de Chipre.
Las noches se oían
Lejanos ladridos
De chacales vagabundos
Frente a las puertas
De los siete cielos
Como desgraciados ejemplos
De la asimilación
Jueves, 9 de Febrero 2006
Cisne muerto
(Fragmento de la prensa local)
Desde la tarde de ayer llegaban a la capital las primeras inquietantes noticias sobre el descubrimiento, en las oscuras aguas del Danubio, de un cisne muerto, cerca de un suburbio industrial.
Paralelamente, hallazgos pertenecientes a un antiguo carro de guerra decorado con el emblema del Sol y terrorífico que se encontraba en ambas partes de la ribera de este río barbudo, sombreaban cada vez más la evidencia de este – de todos modos curioso – asunto, reconfirmando mi persistente sospecha del trágico fin del inmaturo y superficial Faetón, que había expirado en los brazos de un veterinario municipal,.entre convulsiones, con el cuello envuelto en una bufanda roja y llevando las huellas del virus de la tristeza H5.
Lamentablemente…
En los días siguientes se confirmó que fue decimado un batallón de ángeles pasajeros, que se morían de frío soñando despiertos en los escaparates de una bóveda celeste implacablemente oscura e iracunda.
Cuantos testigos oculares los vieron
ya casi sin vida
siguiendo como hipnotizados la línea de caída
del último carro con emblema del Sol
de la Época Moderna
…tal como decían.
Sábado, 4 de Febrero de 2006
Subida del nivel de las aguas
Juguetes de los aires
Algunas distraídas nubes
Escuchan atentamente los ecos
De la lluvia
En superficies metálicas
Y cúpulas chapadas en oro.
Ignoran por completo la amenazadora
Subida del nivel de las aguas
En cercanos cauces
de falóforos, dragoniformes ríos.
Y también ignoran
Cómo su mecerse
Se refleja en el semblante
De la luna, salpicándola
como la rosácea.
Jueves, 16 de Marzo 2006
Nikolaos Vlahakis nació en el pueblo de Vrises Merambelu departamento de San Nicolás, Creta, Grecia en 1967. Estudió filosofía en la Universidad de Sofía – Bulgaria, "San Clemento de Ochrid" (SU Kliment Ohridski ). También administración publica en la escuela National de administración pública en Atenas y realizó estudios de posgrado en relaciones exteriores y estrategias en el "Centro Europeo de Investigaciones internacionales y estratégicas de Bruselas" (CERIS/2000 – 2003). Se ha desempeñado como agregado de prensa de las embajadas griegas: en Tirana (Albania) Brusselas (Belgica) Sofia (Bulgaria) y Budabesta (Hongria) como también en las Representationes Permanentes de la Unión Europea. Hoy en día cumple sus funciones ante la embajada griega en Berlín – Alemania.
Algunos extractos de su primera colección poética "Cita de la fuerza multinacional o Terra incógnita" ( Edic. Gabrilidis 2002) se han traducido al ingles y al búlgaro en la revista "literaturni Balkani". Se han publicado igualmente en periódicos y revistas griegas y de otros países artículos suyos de literatura, política internacional y teoría social.
En el año de 2011 salió publicada la segunda colección poética de la editorial Gabrilidis "El Puente de las Águilas" que ha sido traducida al alemán (inédita). En el 2016 se publico la tercera colección de poemas "De la turbulencia y la sombra -Idola tribus".
Publicado el 22 de mayo de 2017