Juan Esteban Londoño (Colombia)
Por: Juan Esteban Londoño
El país de las palabras rotas
1
Dos jóvenes bailan desnudas
una canción pagana.
Se toman de gancho y giran.
Sus pechos tambalean.
La ley de la aldea decreta que nadie
puede mirar la ceremonia.
Yo, sin embargo, me amparo
detrás de un abedul y observo.
El Danubio lleva la música.
Mis palmas hacen el ritmo.
Las mujeres me descubren,
sonríen y danzan.
A pesar de mi voto
me consagro a este ardor.
2
Golpea el cuervo mi puerta con su pico,
trae el sabor de un mensaje:
La noche en que te devoró el pantano,
tu hijo, asomado al agua,
tocaba la flauta de los desaparecidos.
3
La metralla quiebra
los cristales del templo.
Una estatua cae y se parte.
La niña se tira al piso
y la cubro con mi cuerpo.
Confío en que mi susurro
pueda salvarnos de esta lluvia.
Mas soy incapaz de hablarle:
mi lengua siente en otra lengua.
5
Un pájaro muerto
sobre una sábana de hojas amarillas.
A su lado, unos zapatos viejos
abandonados al frío.
Parece que me hubieran invitado
a morir aquí,
a cantar desde el fondo
una serenidad intraducible.
6
Se me reveló cuando perdí
el instante de temblar a su lado:
el amor tiene
el nombre de mi abuela,
desnuda bajo la noche.
7
Durante largos años
hablé solo con las paredes
acerca de las ruinas de la palabra.
El dolor me golpeó la lengua
y olvidé mi nombre.
Cuando se descongeló la gota
suspendida en el marco de la puerta,
ya no tenía rostro.
En este nacer, desaparezco y danzo.
8
Un niño orina sobre un tronco,
trata de agarrar el vapor,
se moja los dedos.
Un pájaro sin alas
se ríe desde una rama:
¿Persigues la verdad?
Ella siempre está cayendo.
Ranzhasi
El ocelote escapa cuando oye los disparos.
El Guatapurí se arruga y un vapor me guía.
El manantial burbujea en la caverna,
yaces boca arriba en el pantano.
Un águila te saquea el vientre
y deposita en él casquillos de bala.
El pájaro grita un nombre
casi humano, luego desaparece y ríe.
Yo corto mi trenza y la ofrendo
en el altar de las inundaciones:
¿Qué dedos esparcieron
el veneno en tu garganta?
¿Cuál fue la última vocal
que alcanzó a tocar tu lengua?
¿Cómo decir que la muerte no respira
si ha trepado a la Sierra de ojo blanco?
Quiero creer que la alhucema nace,
a pesar de que haya miedo.
Juan Esteban Londoño nació en Medellín, Colombia, el 13 de febrero de 1982. Es escritor, docente e investigador en las áreas de hermenéutica, literatura y religiones. Doctor en Teología en la Universidad de Hamburgo (Alemania). Estudió Filosofía y Maestría en Filosofía en la Universidad de Antioquia (Colombia). Tiene además una Licenciatura y una Maestría en Ciencias Bíblicas en la Universidad Bíblica Latinoamericana (Costa Rica). Es autor de la novela Evangelio de arena (Colombia, 2018), del libro de ensayo Hugo Mujica: el pensamiento de un poeta en la poesía de un pensador (Argentina, 2018) y del poemario El país de las palabras rotas (Nueva York, 2019). Ha escrito diversos artículos científicos sobre filosofía, literatura y religiones. Sus cuentos y poemas han sido publicados en diferentes revistas y traducidos al inglés y al ruso. También ha participado en diversos proyectos musicales como vocalista y compositor.
Links a Juan Esteban Londoño
-Juan Esteban Londoño. Selección de poemas. Literariedad
-Juan Esteban Londoño. Nueva York Poetry Review
-La crucifixión de Jesús en la literatura latinoamericana contemporánea’, de Juan Esteban Londoño
Publicado el 19.05.2021