Pedagogía para la vida nueva
Por:
Rati Saxena
Traductor:
Carlos Flórez
Qué cosa soy, no lo sé
Me pregunto aislado, agobiado por mi mente, cuando
el primogénito de la verdad haya venido a mí, recibiré una parte en aquel mismo mundo.
R.V.1.164,37
Mucho antes, en el Rig-Veda, el vidente dice: no sé quién soy, ni de dónde vengo, llevo esta carga sobre mi cabeza y deambulo.
Cuando un Hombre piensa, piensa para todos, su entorno, su sociedad, su naturaleza y todo lo viviente y lo no viviente; pensar es un proceso para el bienestar de la humanidad, no sólo para la individualidad. Y él canta –
Que todos los seres sensibles estén en paz,
que nadie sufra de enfermedad,
Que todos vean lo que es auspicioso, que nadie sufra.
Om paz, paz, paz.
Pero cuando el Hombre empieza a pensar sólo para sí mismo, para su propia comodidad, para su propia creencia, sin mostrar respeto por los demás, la identidad del Hombre y la utilidad de su existencia en esta tierra se limita. Desafortunadamente vivimos en un tiempo en el que el hombre piensa mucho, pero no para la naturaleza, la tierra o el Universo.
Vivimos en un tiempo en el que los límites de los corazones humanos se reducen, nuestras creencias luchan con las creencias de otros, olvidamos respetar a la naturaleza y tratamos de utilizar todo lo que recibimos, como su regalo.
Esto sucede cuando olvidamos el lenguaje humano más antiguo, llamado poesía. La poesía fue el lenguaje que introdujo al hombre en la naturaleza, el que le dio fuerza para hablar con el creador del universo y el poder para crear sus propias deidades, creencias e ideologías.
Este es el poder que introduce al hombre en el mundo científico. Omar Khayyam fue un buen matemático y astrónomo, porque fue un buen poeta. El astrónomo indio Bhaskaracharya–II pudo escribir, en poesía, el mejor libro de matemáticas.
En el viaje del Hombre, la poesía siguió siendo su lenguaje todo el tiempo. Le dio no sólo el sobrevivir, sino también el pensar mejor para el universo.
En los años recientes, hemos aislado la poesía y limitado su poder.
La poesía es el lenguaje de todo conocimiento, que dice: “No me dejes en la oscuridad, sino condúceme hacia la Luz.
No me guardes en la Muerte (debido a la esclavitud del Mundo Mortal), sino condúceme hacia la Inmortalidad.
Si queremos sobrevivir en esta hermosa tierra, debemos amar nuestro sol, la luna y el universo entero, debemos aprender nuevamente nuestro idioma más antiguo que es la poesía. Que nos dio la luz del conocimiento. Que nos ayudará a crear paz y fraternidad.
Sólo la poesía tiene el poder que conecta al mundo.
Rati Saxena nació en India, en 1953. Es poeta, traductora, editora (Kritya), y directora de festivales de poesía -kritya y erudito védico. Tiene cinco colecciones de poesía en hindi y dos en inglés (traducidas por el poeta) y una en malayalam, italiano, estonio y vietnamita y en inglés traducidas por otros poetas. Sus poemas han sido traducidos al chino, albanés, español, uzbeko, indonesio, español, alemán, etc. Su estudio sobre el Atharvaveda se ha publicado como Las semillas de la mente: un nuevo enfoque para el estudio del Atharvaveda, bajo la beca del Centro Nacional de Artes Indira Gandhi. Ha traducido alrededor de 12 obras en malayalam, tanto en prosa como en poesía, al hindi y dos libros de poesía de poetas noruegos, uno de galés y otro de vietnamita. Tiene varios artículos publicados sobre indología en varias revistas.
Premios recibidos: Beca del Centro Nacional de Artes Indira Gandhi en 2004-5, Premio Sahitya Akademi de Traducción 2000, Premio Sate Bank of Travancore de poesía 2001, Premios Literarios de Naji Naaman (Internacional) para 2016. Es miembro del comité coordinador del Movimiento Mundial de Poesía. Miembro del consejo editorial de la revista-Multilingual Journal of Literature and Opto-Art “WürZarT”, y miembro del consejo científico Canzoniere, una serie internacional de libros y CD dedicada a la poesía con música.