Sarah Beatriz Posada (Colombia)
Por: Sarah Beatriz Posada
Aventuro un país sin testigos
sin espías
ni temibles policías de la
infancia
aventuro una ciudad
con alas de mar
sal ebria
ciudades del sur
presencias nuevas tras
su antigüedad
*
Se acerca la noche
como
un jinete cabalgando esporas
oíd
Es el tañer de una flauta innominada
son sus huellas
lloviendo la llanura
APROXIMACIÓN
Para aproximarnos a alguna verdad
Y tocarla en nuestras manos,
Redonda
-fruto que esplende un día!
Para que alguna certeza se intuya,
Es menester
Aquietar
Aquietar
Y mientras la brisa besa el lago
Sereno-casi suspendido-
La luz que refleja el astro
En sus aguas
No nos cegará
LA VIDA ALFABÉTICA MOLECULAR
II
“La vida celular es una cadena de instrucciones
En código genético ACGT”
En cadena
La vida
Se expresa
Canta
La vida es información
Tiene ritmo
Sonidos
Las palabras vienen
Precisamente de allí
De lo primordial
Que crepita
Dentro
Vida: Lenguaje
En una lenguaje
Insospechada
Milagro doble
En Espiral
SOBRE LA VIDA
Que mi voz en ofrenda
Sea la síntesis de lo innombrable
Que pueda expresar
Para todos
Expresar la vida misma
Desnuda, entera
Para que todos
Como de un encantamiento
Volviéramos
Al regocijo, al asombro
Al misterio
A la consciencia de esa
Fugacidad
Que nos habita
Que pueda
Tocar fibras
Lejanas
Con un vocablo
Signado por la luz.
PARA MI SOLEDAD
Para mi soledad basta
Tu sombra
Tu sombra
Tenue
Casi difusa
Como las tardes
De poco sol
Para mi soledad
Basta un refugio tuyo
Un albergue propicio
Un fortuito encuentro
Para mi soledad
La tuya
Inexistente
Viva morada para mi
Tú
Sólo tú
Sin ninguna sombra
Entero
Siempre en mí
Todo para mí
Entero
EFEMERIDES
¡OH AMARGO
DOLOR¡
¡OH MAGRO
OLOR¡
¡OH MAL
AMOR¡
ELEGÍA
Que se parta la luna
-como queso –
Que se desmorone
-como mis días sin vos –
Que se silencie el universo de los astros,
Que entre en mutismo
-como mis noches sin vos –
Ya que no te tengo
Que se apague de tajo el sol
-como mi alma sin vos, apagada –
II
Cuanto de largo hay en la ausencia
Cuanto de extraño
Cuanto
Cuanto sobresalto en medio de los sueños
¡Cuanto!
Los sueños
Que son el único país en que te visito
Que son la única forma en que ahora me habitas
Noche a noche
Noche a noche
Olvido mío
Dulce distancia mía
Mi lejanía
Mi lejanía
POR SI ACASO
Por si acaso
La felicidad existe
La encontrarás
Y al hacerlo
Veras en tu sangre
Subir un pequeño goce
Brotando por tus venas
Y te dirás un antiguo vocablo
Pronunciado quizá
Cuando el nombrar era oficio sagrado
La palabra mantra,
Ensalmo
Poderoso bálsamo.
Por si acaso existe
La encontrarás
Luego pasará frente a ti
Como el día
Como el instante mismo
pronunciado
AZAR
Has elegido el reino
Más acá de la vida
Has tirado tu moneda
Y el aire
La detiene
HACEDOR
Por si acaso
En el alto reflejo
Del sol cuando despunta
Y en su espigado
Brillo
La presencia suprema del hacedor incógnito
LAS LÍNEAS DE MIS DÍAS
Para llegar a ti hube de cantar
la melodía
que divide las aguas
y sobre la cual
la gravedad no existe
como no existe
al extremo, erguido
el ritmo del jilguero
sin las notas del viento
Por eso,
sin ti,
un atronador silencio
invade,
puebla,
dibuja,
las líneas de mis días
Sarah Beatriz Posada nació en Medellín el 9 de enero de 1959. Egresada de Español y literatura de la Universidad de Antioquia. Participó como integrante del comité organizador de los primeros Festivales de poesía de la revista "Prometeo" en Medellín y de su planta de redacción. Ha incursionado como periodista radial y presentadora. Hace parte del grupo de estudiosos de la cuántica y de la nueva conciencia en Antioquia. Vinculada por varios años a la administración pública del departamento. Su poesía expresa la sensibilidad propia de la mujer contemporánea, más allá de los convencionalismos culturales, abierta a la experiencia del amor, el erotismo, la muerte, y partícipe de las últimas evoluciones del humanismo, de la conciencia espiritual. Se ha desempeñado además, como coordinadora de la red de escritores escolares en el género poético. Obra poética: Espejismo y eco, 1987; Cantos al amador, 1995; El libro de David, esto y mi corazón, 1985-1996; El pulso de la luna, selección, 1997.