Esplendor y altura en la inauguración del XX Festival Internacional de Poesía de Medellín El destino humano es un solo ritmo celeste
Esplendor y altura en la inauguración del
XX Festival Internacional de Poesía de Medellín
Por Jairo Guzmán
De acuerdo a lo programado, el XX Festival Internacional de Poesía de Medellín se inauguró el 8 de julio, a las 6:30 p.m. Como en pasadas ocasiones, la lluvia no fue impedimento para que el gran público, que le da vida y sentido, concurriera de manera cumplida, expectante y generosa, a la gran cita anual, patrimonio espiritual y cultural de una ciudad cuyos habitantes han asumido como propia esta celebración que lidera, a nivel mundial, el surgimiento de nuevos Festivales de Poesía, como una manera de fortalecer la conciencia, construir una mejor coexistencia social y asumir la experiencia poética como una forma elevada y digna de resistencia, ante las contingencias de nuestro tiempo.
La inauguración del XX Festival Internacional de Poesía de Medellín, ciclo intercontinental de la Poesía contemporánea, alcanzó el esplendor y la altura espiritual que se adquieren en algún momento del gran recital, al que concurrieron poetas representativos de los cinco continentes.
Nuevamente se logró la atmósfera indicadora de la alta concentración del público, que en esta ocasión volvió a llenar el Teatro Carlos Vieco ( alrededor de 3000 personas) situado en el emblemático Cerro Nutibara. El poeta nigeriano Niyi Osundare, acompañado con sonidos de tambores, leyó sus poemas y abrió el conjunto de dieciocho lecturas realizadas, además, por los poetas: Luigi Cinque (Italia), Caroline Bird (Reino Unido), Darío Jaramillo Agudelo (Colombia), Uwe Kolbe (Alemania), U Sam Oeur (Camboya), Nathalie Handal (Palestina), Luís Carlos Patraquim (Mozambique), Jean Clarence Lambert (Francia), Mohammed Bennis (Marruecos), Gustavo Pereira (República Bolivariana de Venezuela), Jules Deelder (Países Bajos), Koumanthio Zeinab Diallo (Guinea), James Norcliffe (Nueva Zelanda), Imtiaz Dharker (India), John Agard (Guyana) y Yevgeny Yevtushenko (Rusia).
Cada poeta leyó sus poemas en voz alta y se lograron momentos muy elevados de silencio y concentración en torno a la palabra poética, nuevamente reafirmando la vida, con la variedad de voces de diversas culturas. Un público imperturbable ante la lluvia, leal a sus amigos los poetas, con la dignidad de este gran pueblo, ha sido el gran protagonista, el depositario de la poesía contemporánea actual, a través de los poetas participantes en este evento que marca un hito en la historia de la poesía a nivel mundial y contemporáneo porque se logra la conjunción de voces representativas, actualmente, de toda la humanidad. El recital de inauguración llegó a su clímax emotivo y de gran compenetración con el poeta ruso Yevgeny Yevtushenko, quien leyó de manera extraordinaria sus poemas vitales y cargados de humor. En ese momento se accedió a un gran nivel de compenetración entre el público y el poeta. Con su poema En el país llamado más o menos, leído con gran vigor, con la fuerza impactante de su vitalidad, el poeta ruso logró el estremecimiento de los asistentes tratando de manera humorística, con una ironía muy especial, temas bastante significativos en la vida de un pueblo, de un país. El público asistente se sintió muy bien interpretado con la poesía de ese gran poeta viajero, quien hace cuarenta años visitó por primera vez la ciudad de Medellín y se encontró, en aquella ocasión, con Gonzalo Arango, poeta fundador del nadaismo.
Los poemas de los autores del acto inaugural se caracterizaron por ser muy comunicativos y de gran conexión con el alma colectiva de los asistentes. Poesía clara y de gran vitalidad, estilada por la experiencia existencial de los poetas participantes en este primer acto que introdujo a la ciudad en la dimensión de la poesía que invade todos los auditorios de la ciudad de Medellín.
Hasta el momento, iniciando el tercer día después de la inauguración, se han realizado 39 actividades de las cuales la gran mayoría son recitales. También se están realizando cursos, talleres, paneles y conferencias como parte de las actividades de la XIV Escuela de Poesía de Medellín, evento en el marco del Festival cuyas actividades son realizadas por algunos poetas invitados.
Es importante destacar la gran asistencia a todos los actos que han sido convocados con el apoyo de los medios de comunicación, los medios electrónicos y con el despliegue divulgativo por medios impresos como afiches, carteles y la programación general, en un cuadernillo que ha servido de bitácora para moverse en un mar de recitales en toda la ciudad.
Llevar la poesía a las comunas y zonas marginadas ha sido labor del Festival desde hace veinte años. La ciudad lleva impresa en su memoria y alma colectiva la huella del paso de los poetas que tan amorosamente llegan al ser sensible de los asistentes.
Nuevamente en el Festival se ha comprobado la evolución del público que ha aprendido a conectarse con el fluido poético que circula por los poemas.
Es admirable la manera como la poesía es escuchada. Es significativo el devenir poético de un grupo social que tiene el privilegio de conocer de primera mano la poesía que se escribe en todo el orbe. De ahí que el Festival sea entraña pura, patrimonio espiritual y cultural de un pueblo que día a día se reafirma en su propia luz ante las asechanzas de la oscuridad.
El domingo 11 de julio se realizam en la ciudad, cinco recitales desde las 10 a.m hasta las 4:30 p.m. Y seis recitales en respectivos municipios de Antioquia, a partir de las 5 p.m.
Julio 11 de 2010