Poema Colectivo
Texto escrito, durante el VII Festival Internacional de Poesía en Medellín, por el público asistente
El texto que presentamos es el resultado de una práctica desarrollada durante el VII Festival Internacional de Poesía en Medellín.
En pliegos (70 cms x 100 cms) de papel Kraft, imprimimos, en la parte superior, la inquietante frase de Isidore Ducasse: La poesía debe ser hecha por todos. Y en la parte inferior: Escriba un verso del gran poema de la ciudad.
Se exhortaba al público, asistente a los recitales, a llenar el espacio vacío del cartel con su propia escritura.
Hubo escritura de versos, aforismos, poemas, frases de múltiples matices, tonos, habla plural dibujada en el papel, grafismos, caligrafías, signos, nombres.
Todo un cuerpo viviente de sueños, deseos, delirios, declaraciones, afirmaciones, exclamaciones, pasando por la escritura; revelando el habla de todos reunidos en torno a la palabra poética de los poetas invitados.
De todo ese universo de signos y palabras, de todas esas piezas de un edificio por armar, nos propusimos obtener un texto medular, un texto esencial, disperso en tantos pliegos.
Tomamos las palabras, las frases, tal como estaban escritas. Omitimos aquellos escritos demasiado trillados en la expresión poética, y por esta razón carentes de revelación, de anunciación de un habla genuina, gestada desde la fuerza que la poesía propone.
Nuestra intervención consistió en realizar una combinación de los escritos preexistentes de tal manera que se aproximaran a lo que puede ser una versión del poema que subyace en todo ese conglomerado de palabras.
Es evidente que hay muchas maneras de articular esas piezas, aparentemente sueltas, y dotarlas de una estructura poemática. Lo fundamental de todo esto es que hemos actuado como simples dispositivos que permiten puentes de acceso a ese poema escrito con la fuerza de lo viviente, con la gran comunicación que la palabra poética logra establecer.
Todo se transcribió en el procesador de textos y a partir de todo ese material fuimos develando este texto que presentamos. Muchos lectores verán su propio texto incorporado en el poema: autores anónimos del poema de la ciudad.
Este es uno de los resultados del Festival, que presentamos al gran público asistente y a los futuros participantes para que juntos vayamos escribiendo capítulo a capítulo, Festival tras Festival, este poema sin fin, itinerante en el viaje de la existencia.
Una frase, expresada por un asistente, respondiendo en una encuesta sobre la significación del Festival, se ajusta a una percepción de lo que el texto colectivo significa para todos:
Zumo vertido, sueño nativo de la sapiencia de las estrellas.
Poema colectivo de Medellín
Cuando el sol dormía y la luna comenzaba
el ritual de su tarea
era momento de amasar la tierra con los pies
y sentir el viento enfurecido aullar
en mitad de la noche.
Los hombres crecían como árboles
y el fuego adorador de la tierra y el ritual
hacían su ofrenda a los nativos.
Llegó el día en que el dador de vida
bebió hasta embriagarse.
Soy Fénix y vuelo sobre una ciudad
ávida de luz
Lluvia de los iluminados
Labios
Sol de los pastos
Toda ciudad es una mano abierta
pronta a recibirnos y a decirnos adiós
Poesía, siempre quise beber de tu sangre
ahora que lo hago
quisiera morir lamiendo tus huesos
Mi sombra
tiene espesor
de alegría palpable
Somos una sola tribu
venimos a escuchar las palabras
venimos a calmar nuestro miedo
te veo entre sombras
te veo entre sueños
te veo entre árboles
mis sueños como espinas atando muros
de la conciencia
donde todo parece real
vidas se desvanecen al atardecer
y con la noche vuelven a vibrar
En un instante se decide un festín
Sólo poesía en tu vientre
dinosaurio perdido en la bruma del tiempo
Eres tempestad de fuego
Cópula con la vida
Sueño
Alucinación
Tanta dulzura
desplegada
Tantos colores
perfumando
la ventana
Tantos aromas
La vida hierve
Tal vez todos seamos UNO
fragmentado
en siete mil millones de átomos
Ebrio de mí y de mi sombra
acudo a este sueño feliz
de la alegría.
Silencioso.
Caos
Blanco
Azul infierno
Calle
Caos
Silencio que llena
Desbordante vacío
Caos
Ausente
Latente
Caos
Universo florido
Desentonante
Negro
Vos
Caos
Yo
Universo
(párpado
inquieto)
pequeña
gota de silencio
flotando
en los colores
del olvido
Espera
Poesía irrecitable
si pudiera beber en ti
Que no diga nadie entre plumas de gallinas chinas
que el placer de las aguas
corriendo por los dedos
y la síntesis antisintética de la vaina
es que sencillamente envuelve la semilla
Convergencia de pensamientos y arte occipital
Trepidación
No hay rosas en la nevera
se cocinan en el fuego de esta vida
buscando el mundo
en una media velada
Vida en revoltijos de un mundo en
la ciudad
Mar milenario donde el pez indígena
se ahogó
El último aliento de los dioses
En la cárcel de la escritura
fluye la expresión
sus poemas
se elevarán
como gotas lácteas
Traigo como arena en los ojos
un poema inmenso que me quema los labios
quiero describirlo como este crepúsculo,
incrustarlo en tu memoria
para que lo recuerdes
cuando estés tan triste como ahora
Saludo estos rayos
saludo ésta luz
que te desamortaja el silencio,
mi oscura ciudad
La gran ciudad sola
se viste de tu miseria
Las sombras son adentro
Sensibilidad
fuente de verdadera irreverencia
Para no sucumbir
ante la tentación del precipicio
la mejor terapia es el fornicio
El son de todo el cuento
es la palabra
la misma que hecha en verso
Yo
Universo
(párpado
inquieto)
pequeña
gota de silencio
flotando
en los colores
del olvido
Espera
Poesía irrecitable
si pudiera beber en ti
Que no diga nadie entre plumas de gallinas chinas
que el placer de las aguas
corriendo por los dedos
y la síntesis antisintética de la vaina
es que sencillamente envuelve la semilla
Convergencia de pensamientos y arte occipital
Trepidación
No hay rosas en la nevera
se cocinan en el fuego de esta vida
buscando el mundo
en una media velada
Vida en revoltijos de un mundo en
la ciudad
Mar milenario donde el pez indígena
se ahogó
El último aliento de los dioses
En la cárcel de la escritura
fluye la expresión
sus poemas
se elevarán
como gotas lácteas
Traigo como arena en los ojos
un poema inmenso que me quema los labios
quiero describirlo como este crepúsculo,
incrustarlo en tu memoria
para que lo recuerdes
cuando estés tan triste como ahora
Saludo estos rayos
saludo ésta luz
que te desamortaja el silencio,
mi oscura ciudad
La gran ciudad sola
se viste de tu miseria
Las sombras son adentro
Sensibilidad
fuente de verdadera irreverencia
Para no sucumbir
ante la tentación del precipicio
la mejor terapia es el fornicio
El son de todo el cuento
es la palabra
la misma que hecha en verso
convierte a Medellín
en Universo
No somos marionetas
Cercados por el fuego
por las escalas de plomo
ruedan los agricultores
Florecerán los prados en tu lira
Librando batallas
en cuerpo de cordero
el guerrero no le teme
a ningún rebaño
Estamos hechos de olvido
Es el verso el que pasea
golpea.