Poemas de Raúl Henao
Por: Raúl Henao
(Inéditos para PROMETEO)
Biografía del ángel
Burbuja la vida, pompa de jabón.
A mi cabecera duerme
Una botella de champaña.
Mi buena estrella
Se repone en el botiquín.
Perico ligero
revoloteo en el correo.
Las cartas chillan en mis bolsillos.
La madrugada escapa
De mi sombrero de copa.
Un corrillo de grillos
No acalla mis palabras.
Preguntan por mis alas de ángel en el bar.
Diciembre de 1982.
Biografía del insociable
Arrastran los días al insociable en su marejada
De recetas ilegibles
Que le ponen letra a la miopía
Música al bostezo
O gárgaras a la mañana.
Y aunque se pasea en la sala
De espera del hábito
Sin cincha o bridas
Que le censuren los sueños,
al vino la embriaguez,
La cintura a la luna;
Le señala al tarjetero por todo oficio su vida
Página tras página un incendio la vida,
Una vida impagable, puntualmente su vida.
A través del espejo
Un agua viscosa corre por mis sueños.
Juego al cuerno o marfil en esos dados
que llaman las horas nocturnas
al convite del odio o el amor
donde transcurre la labor de vivir.
Corro tras Alicia en el espejo
arrastrando una banda de músicos
con trajes cortados en la tela
del porvenir.
Ese modisto viste de novia
el busto de la oscuridad
y ensombrece la corte del rey de oros
con los crespones de una falsa aurora.
La madrugada reúne alrededor de mi lámpara
esa ronda de mujeres-misterio
que cantan viejas canciones
en la madriguera de la ilusión
donde abanicas mi cuerpo huésped de mi risa.
Pensamiento del espejo
Me espía el espejo
el pensamiento:
Mi antagonista
Mi protagonista.
No veo que llevo
El rostro que veo.
Me esconde
La tinta el alfange
Las paredes la hora
El hábito al monje
El cerrojo la aurora.
El pensamiento
Emisario del miedo
Me pasa lo que me pesa
Me pesa lo que me pasa.
Los plagiarios
Que la ceguera los confine a correr tras el día
Al avecinarse la noche
A querer atrapar un pájaro
En la idea de una jaula
A mirarse al revés y al derecho en los espejos
Porque ¡Ay de los plagiarios! Jamás conseguirán
Ahogar a su alrededor el rumor del mar
O le hurtarán su fruto al árbol en flor.
La escritura de la vigilia
La identidad es una cortesía gramatical (Pierre Klossowski).
En plena oscuridad, proseguir el dictado de la vigilia
Sin caer en la fe de erratas
En las trampas de la fe
Por las que discurre el lector distraído
Como si halara el cordón de sus zapatos
Para escalar el cielo sin pagar peaje.
Mientras la propia vida, a término fijo
Se acordona en el espejo
En las medias colgadas de la chimenea
Y afuera se despereza el habla callejera
Con su clientela desamorada o desparejada
Que pasa del brazo marchito de los días.
El fetichismo
Restalla la tempestad en el cielo nublado
de la ciudad.
Un ojo de vidrio rueda súbitamente
Sobre el piso del café,
Objeto de una morosa
delectación
De una concupiscencia
Extrema y minuciosa.
Llegan los que me rondan día y noche
Más al azar del accidente
Que de la substancia
De la locura que del amor,
Más al encuentro del sol que de la soledad.
La madrugada
En la jaula de la madrugada hay un pájaro cantor.
Se conciertan los caminos al sol
Al sueño alterna la vigilia a modo de réplica
No cojea sino el deseo tras las circunstancias
Tras el paisaje la realidad.
Se aparejan y desparejan las ventanas al viento
El pensamiento y las palabras, la arena y el tiempo.
Raúl Henao nació en Cali, Colombia, en 1944. Reside en Medellín. Ha publicado Combate del Carnaval y la Cuaresma (1973), La Parte del León (1978), El Bebedor Nocturno (1978), El Dado Virgen (1980), Sol Negro (1985), El Partido del Diablo (1989), El Virrey de los Espejos (1996). Los poemas aquí incluídos pertenecen al libro inédito La Obra al Blanco (1980-1998). Su obra se encuentra parcialmente traducida al inglés, francés, italiano, alemán y sueco.