Al Mahmud (Bangladesh)
Al Mahmud (Bangladesh)
Cuánto tiempo
permanecerán Cuánto tiempo, durante cuántos milenios Y entonces cuando deja de caer, este buey salvaje Un jarrón de luz derramada flota a lo largo del cielo Ven pasar a otra vasija Esta narrativa melancólica, o cielo, o velo,
abiertos mis sedientos ojos, imbuyéndose de estas vistas?
Todo se cansa, aún desciende la naturaleza a la oscuridad
distante,
insondable.
Entonces, ¿qué queda, o cielo, o velo?
¿Cuánto tiempo sobrevolaré llevando mi mortaja como un
mantón?
Contemplaré el cielo nocturno mientras se agacha bajo el peso
de mis ojos
como la espalda de un
buey? Quién causa tantas heridas en el cuerpo negro del buey con su
lanza
afilada?
Y de estas heridas qué se derrama
todavía no lo sé.
Es sangre, grasa, fuego o luz blanca
que cae
Día y noche, sin fin, sobre este mundo extraño,
y sobre la vida
Cae y cae y cae.
parece fundirse con la hermosura de la
naturaleza.
O cielo, O velo, así apartas
el jarrón dorado
para ocultarte más allá de mi vista?
Pero nadie lo percibe, nadie se da cuenta de este jarrón
Dorado que consume las entrañas del tiempo;
Nadie le presta atención, porque cada mañana
que gaguea y flota interminablemente
Devotos congregan sobre la tierra, niños
y granos.
Millones de mujeres llenas de terror
se agarran de la cinturas de sus hombres.
Pegadas a estos barrigones, sólo anhelan el dolor
de interminables partos.
De estos nidos carnosos salen uno tras otro
los gorriones del alma
Y ven como se llena el mundo de
sonidos en peligro.
No se convertirá siquiera en estrofa?
Lejos del pueblo humano, lejos del humo, del fuego, del olor a
especies,
Cuánto tiempo debo yacer sobre un costado
en este arbusto, llevando mi mortaja
A contemplar el jarrón dorado y las peleas
de los bueyes.