Alan Brunton, Nueva Zelanda
Por:
Alan Brunton
Traductor:
Judi McCallum, Ana Ruiz y Carmen Díaz
Inéditos
Last dance
Nada más - Che
A ti te dejo todos mis catálogos
no editados, la A y la O
de mi substancia, mi abuso,
mis obras fugitivas
y canciones de vaqueros, las postales
que nunca mandé desde el Infierno
que viví sin
ti, bailadora da da da,
los 883 mensajes
que no suprimí,
estas cosas, este todo, esto
y esto, te los dejo a ti
bailadora
como vayas como vas
te doy mi Cualquiera,
te devuelvo el ave que me diste a mí
bailadora mientras tú
'turne again backe to the world'
Llevo mi cuenco con sus pocas gotas
del Gran Jugo
mientras atravieso tu Camino de Seda
me detengo en cada milagrosa
fuente de agua mineral
por un abraxas te dejo a ti
escucho las conversaciones de las mesas
donde los ciudadanos regulan
el Interés Público pero te dejo
sus decisiones a ti
bailadora allí te vas allá te vas
las noches nómadas
busqué
'la hierba Lunatica' te la dejo
bailadora
cuánto he disfrutado tu companía.
La vida transcurre desde la A a la B, eso es todo
bailadora
Nosotros dos
Somos dos - está bien
en este Ja Ja día
paseamos por la Avenida
hasta las compuertas
y proclamamos La Santa Inundación
a las Rocas de las Sirenas
Tony de Gregorio
está pintando casas
'Hola Tony
¿por qué no vienes con nosotros?'
Jarandeamos a través del parque
sosteniendo nuestros sombreros
Una puerta cae desde un árbol
casi cortándonos las cabezas
y todos nuestros dolores nos dejan como las ah
ah a-lucinaciones de una polilla
¿Recuerdas los pájaros
en aquel mercado
donde compramos
aquella increíble tela?
La luna se desdibuja
como una Princesa de Blanco Nilo
y la brisa aleja las nubes,
las monedas de cobre nunca más circularán
Sí, las puertas abiertas de par en par
para nosotros, vamos a entrar
Tony pinta todas las casas en blanco
'¡Oh!' dices
'¡qué vista!'
y tú también - en este JaJa día
Aletheia
Nadia conduce al océano
debajo de las estrellas fugaces.
Ella hace el 'No'
sonar como la palabra más solitaria;
el viento va despacio
pero ella es rápida,
desde hace mucho tiempo y desde muy lejos su abuela decía:
'Mírala - no se quedará aquí'
Oh Nadia /
para
Retrocede
Dejé mi habitación, aquel pequeño
universo recojido
con candado de dos dólares, mi máquina de escribir
sobre la mesa con mi
novela sin terminar al lado, para encontrar a Nadia
pero es invisible,
ella no se enciende como tabaco o mañana
Oh Nadia
para
Retrocede
Quién calzará tu zapato
Ella cruza la frontera
con los otros refugiados hacia las 40 noches de eternidad.
En la edad oscura de los proximos 1000 años
los turistas aparcarán su arca amarilla
en este lugar
y desembarcarán
para leer el mensaje de la placa:
Él iba despacio
pero Nadia iba rápido-
hace mucho tiempo, muy lejos.
El nuevo CD
El ruido de la calle desaparece
cuando caminas a través de ella,
no hay
clamor de
las masas, la vida diplomática
continúa
aunque repúblicas en guerra
rehuyen el compromiso.
Cabalgas
un burro blanquísimo
Condesa
y una vez que has pasado
la luz
dispersa también, la calle
vuelve a
Las Edades
de la Oscuridad
pero una vez que estás aquí
el saxofón
trepa amoroso a mis oídos,
sí, el jazz
continúa
entonces Baila
pequeña bailarina
gira contra
el ángulo de decline, Baila
a través del puente de las desdichas
hacia el futuro
loca con quejas
Fiebre
El poeta vive en una torre donde San Dios
cae encima de él desde a un millón de grados
desde nubes magnéticas
cada 27 segundos
con dientes brillantes
y piel que nunca envejece.
El poeta quema sus dedos en la realidad.
Desde que nuestro pueblo abandonó
la cuestión de la Verdad
Dios no hace nada excepto estar colgado
en el precipicio, esperándonos
para encontrar un uso para él; nuestro siglo
es la esquela de Dios. Su divina imagen
llega a ser inestable y decae en el flúor.
Dios carece de potencia económica.
Él es menos importante para nosotros que las bananas.
Sólo rezamos para mantener a nuestras abuelas felices y
porque sabemos que en el principio
hubo una gran explosión
y 3 segundos más tarde: galaxias, sistemas solares, vida
como la conocemos,
la angustia del siglo veinte,
una cosa sigue a la otra. Si no siguiera
la vida sería inconsecuente. Es la verdad.
Hoy no sabemos por qué
gritamos a Dios pero nuestro llanto nunca tiene fin.
Alan Brunton (14 de octubre de 1946 - 27 de junio de 2002). Fue un poeta y dramaturgo que incursionó con performances desde 1969, creando dramas con el grupo reunido en torno a la revista Freed. Viajó por Asia y Europa, interesado particularmente en el ritual del performance del Ballet de Sombras en Bali. En 1975, constituyó con Sally Rodwell y Rose Beauchamp, el White Rabbit Puppet Theatre (Teatro de títeres del conejo blanco). Simultáneamente cofundó el grupo de performance Red Mole. La experiencia de esos años, es la base de su film Zucchini Roma (1995). Publicó entre otros los libros: Slow Passes (Pasos lentos) y una colección de textos breves titulada A red mole sketchbook. Dirigió diversas versiones de Romeo y Julieta. Realizó nueve films y videos. En 1998 editó un CD titulado 33 perfumes de placer.