CÉSAR SECO (República Bolivariana de Venezuela, 1959)
CÉSAR SECO (República Bolivariana de Venezuela, 1959)
De El viaje de los argonautas
IV
Cuánto nos preparamos para esto.
En lo alto de la proa lo que se respira es oquedad.
Cada uno escribió su propia carta al único mundo que tuvo
y quizá no vuelva a ver.
Se nos olvidó adónde íbamos,
se nos olvidó incluso la fatiga de aquellas
que nos recibieron en el aceitado opio de sus cuerpos.
Cuándo volveremos a ver la antorcha y la bahía.
Alud de desperdicios. Corazón podrido de la manzana.
¿Quién nos trae de vuelta en bolsas negras codificadas
al verde pasto, al silencio de unas cruces blancas?
Cuántas veces creímos estar nuevamente partiendo.
Cuánto pagamos, cuánto para que fuese cierto.
El cielo pesa lo que una muralla invertida.
Todo ha oscurecido en el vientre de una tempestad muda.
Mi vida recalaba en todo esto
y en los horizontes que borró.
Invisible
La noche que caminamos apenas comienza
Juntos la hemos traído hasta aquí
Ya no hay más, dejé de mí cuanto era
Estos días ya no tienen mis pies
Lo que borran detrás es hilo indiviso
Trozo de nadie, escalera sin sostén
Escucho el agua como nada escucho venir
Allá arriba el lobo aúlla
Pasadizo en sus ojos no hay
En su pelambre no hay luna
No hay de dónde saltar
Aúlla allá cual si una mano sustrajera una
Estrella
a Benito Mieses
SKP*
La mariposa dejó sus alas de tigre en el bombillo
Nada como la playa donde nada suena
Nada como las olas devolviendo el mar mudo
Cielo de mugre, cama, puerta
Nada como estrellas sin saber hacia dónde pasando
Témpano sedimentado de olvido
Nada como la luz alcanzando el muro
Nada como el surtidor que los baña
Y los petardos que no escuchan sus cabezas
* Lectura, aproximación a la instalación «Extracción de la piedra de la locura» de Javier Téllez.