Miguel Barnet (Cuba)
Por: Miguel Barnet
FE DE ERRATAS
Donde dice un gran barco blanco
debe decir nube
donde dice gris
debe decir un país lejano y olvidado
donde dice aroma
debe decir madre mía querida
donde dice César
debe decir muerto ya reventando
donde dice Abril
puede decir árbol o columna o fuego
pero donde dice espalda
donde dice idioma
donde dice extraño amor aquel
debe decir naufragio
en letras grandes
Cómo cuesta en este planeta amarnos
con tranquilidad
Pablo Neruda
Mientras en las asambleas y en los corredores se discute sobre el improbable equilibrio del mundo
y el diferendo Norte Sur o Sur Sur o Norte Norte, que para el caso da igual,
porque los pobres seguirán siendo pobres
y los ricos seguirán siendo ricos,
yo me pregunto por qué no me dejan tranquilo
cazando lagartijas, colectando memorias ajenas,
santicos de madera y oraciones
y dándole alpiste a mis canarios,
por qué husmean debajo de mi almohada,
por qué socavan a mi errante y solitario corazón,
si yo no soy más que un hombre
atado al mástil de un velero
contra un oleaje inmenso
en medio de una tempestad.
He descubierto un objeto inusual
con el que puedo experimentar
una inmensa felicidad
Se trata de una máquina
que remedia el dolor y hasta la melancolía
Para armarla se requiere de una técnica
un poco complicada
y de un carpintero avezado
con todas las mañas de la carpintería
La he propuesto mil veces a mis amigos poetas
y ninguno la quiere experimentar
Es verdad que se requiere también
de un poco de paciencia
y sangre fría
aunque ella al final logra su cometido
Pero ninguno la quiere experimentar
Obviamente mis amigos son almas atormentadas
y masoquistas
por lo que destruiré mi máquina
y seguiré siendo el mismo tonto de siempre
cuando había hallado la inmensa felicidad
Video: Fe de erratas
EN EL BARRIO CHINO
Yo te espero
bajo los signos rotos
del cine cantonés
Yo te espero
en el humo amarillo
de una estirpe deshecha
Yo te espero
en la zanja donde navegan
ideogramas negros
que ya no dicen nada
Yo te espero a las puertas
de un restaurante
en un set de la Paramount
para una película que se filma a diario
Dejo que la lluvia me cubra
con sus raíles de punta
mientras presiento tu llegada
En compañía de un coro de eunucos,
junto al violín de una sola cuerda
de Li Tai Po,
yo te espero
Pero no vengas
porque lo que yo quiero realmente
es esperarte
MIENTRAS CAEN LAS BOMBAS EN BAGDAD
Yo voy contigo al malecón
a contar las olas
y los pájaros que vuelan sobre el mar
Y es que las bombas en Bagdad
sólo se ven en las noticias
Así que yo sigo contando las olas
y los pájaros que vuelan sobre el mar
mientras ellas caen sobre las casas
y los hospitales y las mujeres y los niños
Pero yo amo tus ojos y tu piel
y quiero estar a tu lado
Claro que las bombas en Bagdad
me hacen un nudo en la garganta
pero ¿qué voy a hacer si no puedo evitar
que caigan las bombas en Bagdad?
Seguiré contando las olas
y los pájaros que vuelan sobre el mar
porque en los cuatro puntos cardinales
en el muro del malecón
o en un bosque de la China
la vida comienza cada día
como en cualquier lugar de este planeta
HOY QUIERO ESTAR TRISTE
Por fortuna, he dado de comer
a mis pájaros
y he regado las plantas
Fue el instinto de la mañana
quien asesinó al canario enjaulado
y nadie ha venido a enterrarlo
¡Pobre cuerpo tan frágil!
¿Quién podrá devolverme
sus ojos de fósforo azulado,
su plumaje amarillo?
Oscuro y sin antifaz
me cobijo en la bóveda de la noche
y que me perdonen las pitonisas
y el zodiaco
pero hoy quiero estar triste
Miguel Barnet nació en La Habana, Cuba, el 28 de enero de 1940. Poeta, narrador, ensayista, etnólogo, musicólogo y guionista. Colaboró con Alejo Carpentier en el Instituto Cubano del Libro y con Nicolás Guillén en la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba, institución de la cual es fundador y actualmente Vicepresidente por elección. Es el escritor cubano vivo más publicado dentro y fuera de Cuba. Su bibliografía exhibe los siguientes títulos: La piedra fina y el pavo real, Isla de güijes, La sagrada familia, Oriki y otros poemas, Carta de noche, Mapa del tiempo, Viendo mi vida pasar y Con pies de gato (poesía); Autógrafos cubanos, La fuente viva, (crónica, ensayo); Akeké y la jutía, (fábulas cubanas). Biografía de un cimarrón, Canción de Rachel, Gallego, La vida real y Oficio de Ángel, (novelas-testimonio). Actualmente escribe una obra sobre los sistemas de adivinación de la santería cubana y algunas crónicas de sus viajes a África y Asia. Sus inquietudes etnológicas lo llevan a la Literatura para escudriñar en los componentes étnicos de lo cubano. Prueba de esto es la publicación en 1966 de su libro Biografía de un cimarrón (Al momento con más de 60 ediciones en múltiples lenguas y países). Aquí el etnólogo indaga sobre las raíces cubanas y utiliza para ello a un testimoniante, Esteban Montejo, ex-esclavo cimarrón de 106 años de edad. Ha escrito guiones de varios documentales cinematográficos y de los conocidos largometrajes cubanos Gallego, basado en su novela homónima y La Bella del Alhambra, inspirado en su novela Canción de Rachel y premiado en el Festival Internacional del Cine de La Habana, así como en otros certámenes internacionales, como el Premio Goya en España, 1990. Ha recibido numerosos premios y distinciones, entre ellos: el Premio García Lorca, el Premio Nacional de Literatura de Cuba, el Premio Internacional Trieste de Poesía y el Premio Juan Rulfo de cuento 2006 por su cuento Fátima o el Parque de la Fraternidad. “Miguel Barnet nos ofrece un caso único en nuestra literatura... en virtud de sus proyecciones poéticas. De su obra se podría extraer todo un refranero, valga decir, una literatura gnómica” (Alejo Carpentier). “Con Cimarrón, por primera vez, la palabra ‘único’ adquiere un sentido más cabal. No ha habido un libro como éste antes y es muy poco probable que pueda volver a repetirse” (Graham Greene). “De los poetas surgidos con posterioridad a la Revolución, con la cual se halla desde luego estrechamente identificado, Barnet es uno de los primeros en encontrar voz propia. En sus poemas, las preocupaciones concretas que animan también sus estudios sobre el país, unidas a un penetrante lirismo directo, le permiten una mirada cubana, según su voluntad, dentro de una línea que puede ya considerarse característica de la expresión nacional. El surgimiento de esta poesía joven, desaliñada, vuelta con cariño sobre las cosas reales del país, es una de las alegrías de la literatura cubana más reciente” (Roberto Fernández Retamar).