Hassan Teleb (Egipto)
Por: Hassan Teleb
PROMETEO
Revista Latinoamericana de Poesía
Número 80. Diciembre de 2007.
Azucena del cuerpo
Es la dueña del Cuerpo
y él es su dueño
no le conoce nadie más que ella
y nunca la ha visto embadurnar sus miembros
con la ceniza de las leyendas de alguien
sus yemas se apaciguaron
mientras ella se divertía en una negrura como el bordado
concadenado sobre la superficie
de él extendió un bucle sobre la frente
y dio rienda suelta a lo demás
siguió examinando el perfume del amante
para enfrentarse con él en una esquina
Fue por la tarde y en la sombra dominante... se metieron bajo ella
no se veían desde tiempo remoto.
Cuántas veces murieron y cuántas vivieron
Ella embellece sus hombros al igual que un Etíope
y mira desde uno como dos noches
con dos vistazos que son más temerosos cuando se ven
y él apunta desde uno como dos luceros
reposa y parte desde uno como dos brasas
si se calma estará con respiro
si parte va en caballo
y si alancea será con uno como una estaca
Fue su escultor quien descansó al instante
de haber terminado sus estatuas
luego examinó sus fracciones
asegurándose de su género y su número
quedaron levaduras de lubricidad que tornan y respiran
entre las venas de mármol
las soltó dándoles sus tallas, y se dijo: rescaten y se han rescatado
de repente una hembra apareció en la atmósfera
con lo que quiso y con lo que no quiso
cuerpo macizo y alma delicada
Te viene con el fuego en un jardín
te enseña la mariposa en la liona y te ofrece la miel eterna
anudándose en ningún anudamiento
te adormece sobre sofás de los que adorna Dios
con brocados y felpas dobladas
dice: ¡Oh! mi Señor
estoy con los racimos de uvas
con mis aves y mi carne
y todo lo que en él has pensado o no has pensado
está a tu disposición
coge lo que quieras
Es brillante cuando mira
y obediente al recibir una orden
cuando bebe bebe vino
y cuando lancea lo hace en lana
La estatua renunció al regalo del escultor
y hecho de menos a la piedra pura
el artista resumió la idea
retrocedió espacios con su cincel
estuvo a punto de no creer en la escultura
dijo: has derrochado, para
Es la dueña del cuerpo
yo fui su compañero y dueño de su virginidad
si me desvío estoy en su brocadero noche
y si me oriento
es por la brillantez de sus senos
y si vengo en la mañana
voy montando a caballo
Soy quien se ha familiarizado con ella
dejando su cincel para divertirme tocando la brasa
me vinieron poemas insólitos
que contaron una composición desconocida por los filósofos.
Dijo un sabio que el arte es imitación y otro dijo:
es imitación de la imitación
pero el artista siguió contando
hurgó el fino cuerpo vivo con un cincel
dijo: la chispa es de quien toca la cuerda
aunque la luz es de quien lleve la hornacina
Es la dueña del cuerpo
cada quien le es equivalente es su compañero
y tiene ella de él el hatillo de leña para el fuego
él tiene la suerte de un principiante
y yo tuve la paciencia al inclinarme hacia ella pero al empezar a sentirlo
Vi que todo lo que tenía en mis manos
se deslizaba entre los dedos
dejándome en mi melancolía
Los ojos del artista cayeron en la estatua sobre su fotografía
volvió a mirar
intentó desalojar el original
y al cansarse
tiró la máscara del niño diciendo: el arte es un juego
Es la dueña del cuerpo
está hoy sola asechando al solitario
y cuando adquiere lo querido le ignora
no queda de lo que le indica
más que un escalofrío detrás de cada encuentro
y dos ojos agradecidos que fingen no ver
medio abiertos con la voluptuosidad del brasero
está reposando hoy delante de la puerta de la ciudad como un observatorio
cazando sus varones
para coquetearles uno detrás del otro
antes de convertirse de un bloque de espacio
a una llama en el tiempo
que luce algún momento
y luego se extingue
para dejar desnuda a la oscuridad
así se unen furtivamente el comienzo y el final
y el hoy se junta con lo eterno.
Afinando el caos espaciotemporal
Mi pluma es apta para la circunvolución
Casando palabras en conexión
Mi pluma es una maga
Capaz de cavar hondo
Para rastrear la perla del presente
en la ostra del pasado
Sin embargo, mi pluma es incapaz de volver
al mundo en sí
Antes de elevarse el sol hacia el Occidente
Antes de llegar el charlatán tuerto
Desde donde todo retrocede a las concavidades de la tierra
Y toda semilla regresa a su origen
Enroscándose y amasándose como una pulpa
Alojándose bajo el suave y suculento útero
Para convertirse en grano
De allí el grano se convierte en espuma
Rebosando
De fervor masculino y de éxtasis femenino
Excitada por el calor que brota en sus entrañas
El latido de la germinación
El temblor que se siente al injertar el arcano
En el cual la fracción se aloja en el todo,
El contenido se encierra en la forma
Lo que fue ... lo que será
Se condensa en un fluido espeso
Reflejando la creación primordial.
En el receptáculo de la eternidad
Esencia y sustancia
Juntas se reúnen
Revirtiendo materia en líquido
Con un fluir arrojando
Los restos de tiempos pasados.
Cada embrión
Retrocede en espuma, en arcilla, en una pizca de polvo
Flotando sobre la nebulosa espuma azul
A lo largo de las partículas de polvo cieno de fangal
Para entrar en la órbita del devenir
En el remolino del divino fervor del amor.
Entonces se esparcirán los elementos de la tierra
Difundiendo los siete colores
del arco iris.
El lazo imaginario entre
El lugar y el tiempo se desata
Todo crece enajenado
Mientras que la muerte sigue siendo el origen
La presencia se ve capturada por el momento
La concordia efectuada por la contingencia
De ahí, el hombre y la sombra convergerán
Toda materia recuperará su origen.
Aquella hambrienta y seca pluma mía
Intenta sin cesar resolver turbulentas conjeturas
Medra por un susurro de amor que se desvaneció como un espectro
Un amor que en otro tiempo estuvo allí.
Hassan Teleb nació en Sohag, Egipto, en 1944. Se graduó en filosofía en la Universidad del Cairo. Ha sido profesor de estética en la carrera de filosofía en la Universidad Helwan de la misma ciudad. Coedita la revista literaria Ibdaa, de circulación mensual. Sus poemas han sido traducidos al griego, francés, inglés y castellano. Recibió en 1995 el premio Kavafis de poesía. Ha publicado, entre muchos libros, A tattoo in a Girl´s Chest, The Violet´s Biography, FIRE immemorial Within Light Immortal, The Era of Olivine, The Holy Verse of the Arabic Setter y No Nile but the Nile. Es corresponsal de la Revista Prometeo en Egipto.