Felipe Posada (Colombia)
Por: Felipe Posada
¡Todos estamos juntos!
Solo ocupamos diferentes situaciones
si les parece bien, otras dimensiones
habitamos espacios reducidos al infinito
se pierden los límites entre los ojos
jugamos a encontrarnos en cada carmín
en el confín de las cosas pequeñas
Observemos los detalles
nos hacemos presente
que hay del ayer más que el resumen de esto
el futuro nos acaricia en cada parpadeo
día a día cumplimos nuestra cita
No digan que somos lejanos
que no hay algo que nos una
que no se puede rescatar nada
que no hay fe, esperanza, ni alguna cosa semejante
que de los recuerdos ya sólo queda el polvo
que lo hermoso y el amor han desaparecido
que hay ausencia y pérdida
que ni un instante de alegría podría salvar al resto del sufrimiento
¿Por qué?
Lo sienten, ¿No lo sienten?
Somos un mismo arroyo
en las noches sin vernos dialogamos, cantamos y danzamos
no estamos separados jamás lo estaremos
¡Todos estamos juntos!
Sacudirse la muerte
Como un perro recién mojado echa fuera de si todas las goteras
luego se larga a ensuciar nuevamente sin importar más
Porque es hora del parto y sale triunfante el nacimiento
Miren: En el muñón del tronco germina con vitalidad otra rama
Después del frío retoman el pulso los corazones
Pues los panales están llenos de nuevas abejas y mieles
Desde siempre las células multiplican sorpresas
Amores se incuban sin preguntar su porvenir
Sacudirse la muerte ya que es vida todo lo existido
Tu primer nombre
Las arrieras recorren como si fuera un nuevo camino
símbolos tallados en un Yarumo
Los amantes que se visitan en el parque deben preguntarse
a quién pertenece el bolígrafo que se adelantó
para grabar su compromiso en la banca que se besan
Desde el aire las garzas entienden el orden de las piedras
que dispuestas en la arena rezan la palabra que llevamos desde que nacimos
Las nubes insisten en formar figuras voluptuosas
para que después sus goteras caigan alineadas
y calquen en el suelo el extraordinario apodo
que le dio a la hermosura el universo
Ya las paredes de la ciudad son alegres pues con amarillos, rojos y azules
le grafitean memorablemente letra por letra
Cuantos lugares y cosas en que se ha tatuado
pero sólo en tu pecho esta escarificado: Amor.
Danza
Llueve, día tras día
cuando no en la mañana si en la tarde o noche
las goteras no avisan y despiadadamente atinan al seco
Mojémonos
chapoteemos en el pantano
abracémonos fuerte, exprimamos lo tibio
altura clarea
cresta de montaña puntea
abre flor
prende hoguera
evapórate charco con tu aceitoso arco iris
desempañen los días
bailemos
bajo la opacidad
y este repicar del agua chocando
las nubes al pensar que nos burlamos de ellas
se arrojaran más fuerte
entonces Escampará
Burlesque
De vagos tirados en la calle
Y de cuanto hermoso ha parido Baco
Sea esta canción y la de los empinados dionisíacos
Muchos humanos aguardientosamente amigables se han conocido
hasta han compartido comidas, abrazos, riñas y gustos
Hemos visto por ahí, dientes podridos besando y amores nacidos.
Traed al mundo que ha sido siempre de sobrios e infelices
Emborracharle para que gire y de vueltas al inverso
Mínimo le sacaremos una áspera sonrisa
porque la resaca ya la tiene hace mucho
Bagatelle
Aquella naranja desea madurar, engalanarse de rojos y amarillos, atraer la vista para ser engullida
Del huevo polluelos anhelan salir, luego del nido, desplegar en viento y trinar al oído
Flores olorosas ambicionan prenderse a las ropas
Crisálidas colgantes queriendo dejar salir su huésped para embellecer el camino
El oleaje lanza masas de aire aspirando abrigar
Hacia todas las direcciones el sol grita enérgico que ansía bañaros en luz
la luz desea opacar la piel, calentarla para quienes te pretenden…
Suspiran cuando pasas libre, enredándote en lo que haya
Son tantos deseos que no puedes dejar de desear ser lumbre, brasa, carbón, ceniza
Quienes te aman esperan que estés bien, lo estarás
Pues a la muerte que lo desea todo le ha ganado esta exaltada carne deseosa de ti.
Fantasía
Un fruto maduro, muy maduro
Desde su rama hacia el suelo se lanza como kamikaze
Un fruto maduro, muy maduro
Quiere explotar
matar su madurez
regar sus entrañas en la tierra
Un fruto maduro, se da duro
Una fruta muy madura, no dura
Se lanza contra el ave rapaz, paz, pam, pun
punza el gusano no lo deja crecer
cabum, contra el hambre del hombre que la desea comer
tin, tan, para el mordisco animal
Fruto hado, alado, amado por su madre árbol
naturaleza, esa, no esta la del humano, que no brinca cuando madura;
se pudre,
Si salta estalla, se halla, allá está pura la fruta madura bombardeando
esta tierra de que quien quiere vivir de una paz, bun, bang, tin, tan,
de fruto que madura se dé un pepazo y dé el otro paso
Orquesta
Vemos la luna al lado
de la estrella
A pesar de la lejanía
somos un solo plano
¡Los celestes tenemos compañía!
Las nubes colisionan fuerte
y livianamente entre sí
para aliarse en trueno y rayo
desencadenando otros choques y uniones
de centelleante luz
y profundo rugido
¡No temamos a la unificación!
La luna pronto
chocará con la estrella
sin lograr ningún daño
más que a la soledad
Después de haber surcado, cultivado y abonado
El gusano sale enamorado del hogar
Se hincha al sol
se retuerce, luce
se inmola
en su baboso tronar
se escucha el grito de la tierra
Hondo
el pecho se ensanchó
Sintió frescura
Un jalón
le derrumbó
le sumergió
Revolcado en la hojarasca
Enredado en la corriente
Era arrastrado
No sabía si por largas algas o gruesas raíces de ceibo
Hala los vellos de la corteza
Siente cómo los poros se pellizcan
Montículos carnosos levantándose
Los hilos largos aferrados y gruesos se estiran
logrando una sensible cordillera
que reta al cielo
FELIPE POSADA nació en San Carlos, Antioquia, Colombia, en 1985. Luego de haber vivido en su pueblo natal durante su niñez, el conflicto colombiano se agravaría haciendo que su familia se viese en la necesidad de partir hacia Medellín, esta partida marca su existir, reflejo de ello son sus poemas donde se puede encontrar; la añoranza por el campo, el reencuentro con la tierra y elementos naturales, la incertidumbre propia de la ciudad, el conflicto de su país y el pensar y acción humano.
Autor de los poemarios: El Día a su Degüello, 2008; Arritmias de Gris, 2010; Striptease del camaleón, 2013; Inocencia aplazada, 2015 y el libro de cuentos Entre flores y calaveras. Sociólogo y músico, técnico en construcción de instrumentos musicales, declarado “Un eterno estudiante de la Poesía el universo y la vida”. Realiza talleres de artes, poesía y lecto-escritura creativa para niños de las comunas de Medellín y el Valle del aburrá desde el 2003. Ha sido poeta invitado al Festival Internacional de Poesía de Medellín en anteriores versiones, poemas suyos fueron traducidos y publicados en diferentes ediciones de la revista Prometeo.
Poemas publicados en la Revista Prometeo # 79
Actualizado el 30 de mayo de 2017
Publicado en julio de 2015