Gerður Kristný, Islandia
Por:
Gerður Kristný
Traductor:
Isabel Plaza
PROMETEO
Revista Latinoamericana de Poesía
Número 94-95. Julio de 2013.
Poema patriótico
El frío me hace
guarida del miedo
coloca una almohada de
plumas a la deriva
bajo mi cabeza
una cobija de nieve
que me arropa
Recostaría mi oído al
agrietamiento del hielo
con la esperanza de escucharlo
retirarse
si no lo supiera
me quedaría pegada
El hielo a nadie deja ir
Mi país
un lecho de muerte destendido
mis iniciales cosidas
en el lino helado
Skagafjordur
Trato de ser
amable con los niños
para que se ocupen de mi tumba
cuando llegue el momento
desmorono galletas en la hierba
en mi cumpleaños
y recito el poema acerca de
las vacas que saltan
ya envejecidas y grises
De todas formas
las reconoceré de nuevo
por el olor celestial del establo
que siempre sean fragantes como el niño Jesús
Norte
Lentamente como los cachalotes
flotamos por la penumbra
que es blanca
aquí en el páramo
Se aferra veloz a lo suyo
concediendo sólo
un mensaje a la vez
Por un momento ellos resplandecen
al lado de la carretera
como las cerillas de la niña
en el cuento de hadas
encendiéndonos
hasta que volvemos
al agujero en el hielo
a respirar
Anne
Durante el día, ni pío
de Anne, que vive arriba en plena viudez
-excepto cuando se duerme
Y su diario
cae al suelo
Aparte de ello, ni pío
Otro asunto es por la noche
entonces es todo un infierno de barullo
los amigos de Anne hacen traquetear las escaleras
gritando sus holas
y abren una fiesta
Algunas con botella de leche agria
otras chupando huevos
Hacia el amanecer los vecinos están cansados
de violines y canciones folclóricas
Los invitados salen de prisa
fundiéndose entre las paredes
Cuando la policía forza la puerta
Anne está sentada en la mesa de la cocina
escribiendo
Partida
Al final
de la rampa
miro atrás involuntariamente
pero has desaparecido de vista
Más allá del cristal
un nuevo día se levanta
desde el pavimento
el azul de las montañas
se extiende a través de mi mente
mientras giro
para continuar en mi camino
Me tropiezo con el borde de mi falda
mi viaje está diseñado
para una mujer más grande que yo
El avión espera en la pista
y siento como si
las amargas hojas de la hélice
hubieran entrado a mi corazón
Strandir
En invierno
sólo el pensamiento
es transitable
Campos de edredón blanco
se extienden
tras los párpados
Un oso hurga entre la nieve
toma el último iceberg
de vuelta a casa
El zapato de María Antonieta
Estaba prohibido
sacar fotografías en el museo
pero aun así lo hice
La imagen se perdió
por lo que sólo existe
en mi mente:
Un zapato raído
y dorado
bajo una campana de cristal
tan infantilmente pequeño
Y los guardias
que llegaron corriendo
dispuestos a
arrojarse ante
los disparos de la cámara
Safamýri
A menudo mientras me escurro
entre sueño y vigilia
bajo el edredón
me parece que podría
ver lo mismo
a través de la ventana
que cuando era niña
la nieve posada
sobre la baranda del balcón y
el vecino con la pala
en las escaleras
Ninguna otra nieve ha tenido
un aroma tan intenso
Gerður Kristný Nació en Reykjavík, Islandia, en 1970. Es poeta, cuentista, novelista, dramaturga y escritora para niños. Se licenció en literatura comparada y francesa en 1992 en la Universidad de Islandia, presentando un trabajo sobre Las flores del mal, de Baudelaire. Fue editora de la revista Mannlíf de 1998 a 2004. Ha recibido los siguientes reconocimientos: The Icelandic Literatura Award, 2000; The Icelandic Children’s Choice Awards, 2003; The Halldór Laxness Literary Award, 2004 y The West-Nordic Children’s Literature Award, 2010. Obra poética: Ísfrétt, 1994; Launkofi, 2000; y Höggstaður, 2007. En su obra, la naturaleza islandesa es temáticamente representada en imágenes impactantes y poco convencionales, que a menudo aluden a personajes y lugares históricos y mitológicos. Sus poemas han sido traducidos al alemán, inglés y finlandés. Ha leído sus poemas en lugares como Kampala, Bazar de Cox, Java, y Maastricht.
Publicado en agosto de 2013