Cao Shui
(chino simplificado: 曹谁), también conocido como Shawn Cao (nacido el 5 de junio de 1982), es un poeta, novelista, guionista y traductor chino. Es una figura representativa de la literatura contemporánea china. Lidera el movimiento de “la Gran Poética”. En su “Manifiesto del Gran-poema”, expresa que busca integrar las culturas sagradas y seculares, orientales y occidentales, antiguas y modernas, en la literatura china. En 2008, renunció a un periódico y viajó alrededor de Tibet y Xinjiang, que son el centro de Eurasia o del mundo desde su perspectiva. Su trilogía de novelas Secreto del Cielo cuenta todo el desarrollo histórico de la civilización humana. Sus más destacados trabajos incluyen Épica de Eurasia, la ya mencionada trilogía y El Rey Pavo Real (serie de T.V.). En sus obras extracta elementos de varias civilizaciones humanas antiguas, desde Babilonia hacia el Occidente hasta Judea, Egipto, Grecia, y hacia el Oriente hasta Persia, India, China, y usa dichos elementos para reconstruir una nueva patria humana utópica, la cual siempre describe como Eurasia, la Cima de la Torre de Babel o las Montañas de Kunlun (Montañas del Cielo).
Hasta ahora veinte libros de Cao Shui han sido publicados, incluyendo cinco colecciones de poemas, tres colecciones de ensayos, diez novelas y cien episodios de series de T.V. y filmes. Es miembro de la Asociación de Escritores de China, de la Asociación del Film de China y de la Sociedad de Poesía de China. Actualmente vive en Pekín y trabaja como escritor y guionista profesional.
Esta es una muestra de sus poemas:
Gran Danza de la Tristeza
Estás en el escenario principal
Todos te empujan hacia la tristeza
Tras bambalinas, algunos tocan instrumentos
Detrás de ti, algunos danzan con la música funeraria
En el escenario principal, llorando, tan solo estás tú
Este escenario se encuentra en el centro del continente asiático
Estás en el plató de Pamir, llorando
Gente viene desde todas direcciones
Los asiáticos tocan marchas fúnebres para ti
Y los erupoeos danzan alrededor
Deseando la muerte, te quedas ahí
Eres la persona más común
Y, sin embargo, nadie te dejará ser
Ellos cantan para ti, danzan para ti
Para hacerte más triste
Hasta que pierdas toda esperanza
Hasta que abandones este mundo
Sufririrán brevemente y se irán
Para encontrar una nueva y triste canción.
Caballo dragón de fuego
Hundir la arena
hasta el fondo del agua
quemar en el hielo fuego
Me escondo
en un lugar ignoto
entre el agua y la lumbre
Un dragón como amante
Mi gélida ira se evapora
en el azul del hielo reflejada
A través de los pastos secos
las llamas señorean
abrasan alrededor y las montañas
Me tumbé sin habla sobre el hielo
retina a pleno fuego y hacia el norte
Qué delicada la luna en aquel dragón
insinúa en su brillo la vecindad primaveral
Hacia la pradera renovada
correrá el caballo dragón de fuego
Avanzar sobre el agrietado frío
Refulgente
la caliente luz sobre sus cabezas
Anteriores a la eclosión ígnea
se hunde en sus almas
como año pasado o próximo
Silencioso rey león
El encarcelado
es afín a la libertad
Puede extrañar a su madre
La madre lejos
como si asomara a la puerta
Ella lo extrañará tanto
como extraña a su progenitor
Ir a la cárcel
es estar cerca de la libertad
Un león en su jaula
es la libertad a un paso
El pequeño rugido
que imanta la ladera de Eurasia
puede penetrar en la amplia noche
y alcanzar el sol de amanecer
Entrar en una jaula
es estar cerca de la libertad
Los ambiciosos
se encarcelan a sí mismos
En una expedición
mirar al sol de este a oeste
cruzando por encima de sus cabezas
Los ambiciosos
se encarcelan a sí mismos
como el invierno expulsa el verano
Y él allí
pensando en silencio
Dragón pastor
En lo entrañable de Eurasia
criamos dragones venenosos
Habitan las profundidades
del lago Qinghai
Instalamos la velada
en el Corazón de la Isla Marina
El dragón venenoso
se levanta al amanecer
y regresa al atardecer
son gordos y fuertes
como la meseta Qinghai-Tíbet
Nuestra semilla de dragón
viene del cielo
Cuelgan nubes oscuras
mientras se multiplican junto al relámpago
Cantamos alto para animarlos
Ellos prosperan en las odas pastorales
Somos los perdedores de la civilización
Demasiado fuerte nuestra vitalidad
recurrimos a sembrar dragones venenosos
en lo insondable de Eurasia
Tendrán nueve hijos
y avanzarán en todas direcciones
Después de la eclosión luminosa
el mundo se convertirá
en arcilla de dragones venenosos
Traducidos, desde una versión inglesa, por Roberto Aedo