Yasmin Alfaro
Nació en México en 1998. Estudió Creación Literaria en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México. Gestora y promotora cultural. Directora del proyecto Tianguis CDMX. Coordinadora Nacional en México del World Poetry Movement. Algunos de sus poemas han sido publicados en diversas revistas como; Aleteo Poético, Nomastique, Revueltas Times, etc. Así como cuentos en la antología, Sólo los árboles lamenten tu muerte por la editorial Tinta y Vapor. Sus talleres y performances han sido presentados en diversos festivales y universidades como; la Universidad de la Comunicación, Feria de Revistas Independientes de la UACM, Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil (FILIJ), Centro Cultural los Pinos, Festival Semillas, Centro Cultural Tepito, Festival DIVERSO, Festival Cine de Barrio, FILUNI- UNAM y “Verbena Sorora” en el Teatro de la Ciudad de México, Esperanza Iris. Su tema de interés tanto en la literatura como en su militancia política y cultural, es la descentralización del arte y la cultura. Actualmente está próxima a sacar su primer poemario Saturno en Primavera.
Esta es una muestra de sus poemas:
Metempsicosis
En las cartas está escrito
que subirá un ser desde el mar
es tu alma quien grita y cambia.
No hay tormenta que pare
porque tu cuerpo ya es otro
en contemplación de la melancolía.
Qué te ha regalado el cosmos sino sólo
la cuestión infinita de no saber a dónde vas.
Para que sepas a qué atenerte
te recordaré que serás uno más de los bastardos
que su metempsicosis no detendrá.
Pisa y pisa la llama en furia
porque no puedes saber
que el viento corre
siempre a tu favor.
Aunque el salvador del cosmos
crea que pueda salvar insectos
con su llanto.
Porque llueve
Quizá por eso llueve
porque la mayoría estamos tristes
porque nos duele la cabeza y
nadie nos espera
porque no hay nieve
ni paja dónde aventarse
ni lugar dónde esconderse.
Quizá por eso llueve
porque cruzamos la calle en señal verde
y todos nos libramos de la muerte
menos la señora que fue aventada
por el joven con sueño de corredor automovilístico.
Quizá por eso llueve
porque nos sentimos solos
con el vagón del metro lleno
y gritamos en la oscuridad
cuando nos quieren robar el alma
con una navaja de pretexto.
Quizá por eso llueve
gris
grafito
para dibujarnos más lágrimas
dentro de las lágrimas.
Silencio
Tú que caes como los pétalos en las tumbas
y en las noches cerca de la luna,
es magnificencia proclamar tu nombre
desear el movimiento en ausencia.
Ausencia es lo que se necesita,
para poder dejarte entrar por las ventanas.
Dime cuántas quieres abiertas
para rodear la habitación de color, cualquiera puede ser éste.
Oh Silencio
le pido al universo
poder escuchar la alineación de sus planetas
esferas de de la verdad
bailando delicadamente
perfumando el deseo de bailar
en la línea de tus pasos.
Y en tus pasos vienes con tus alas, ascensional
vienes consumiendo tu propia llamarada
y todo es ceniza
y mirada a la introspección.
Bastardos
Se abrió la puerta y entró un rostro con trazo de miedo
un alma que busca salvación
desde que se aventó al vuelo,
que viene con alas
y la mirada perdida.
Sostén de la madre,
que protege
los senos
de vida
Sostén de cada día.
Delicioso alimento para el ser nacido
bendecido por la madre tierra,
de ser otros de los bastardos que se comerá la paja.
Valiente crianza
que le da su madre
sacuendiendo lo que ya no tiene
libertad para reírse.
Pues no necesita la risa
más que monedas
y no de a peso.
Porque de eso dependerá el alimento
para no ser los que limpian vidrios
de los autos lujosos
que no dan propina.
Para evitar ser el que viva de rutina
de esa pesada
en donde no se avanza
y se despierta de nuevo
con la idea de las alabanzas.
¿Quién salvará a los niños?
¿Quién salvará a los niños?
¿Quién salvará a los niños?
Pero quién salvará también a ellas
a nuestras madres.
